El operativo se saldó con 348 detenidos en varios países, entre ellos EE.UU., Canadá y España, y casi 400 menores rescatados. Las víctimas grababan vídeos sexuales para una compañía canadiense. 

 La policía de Toronto comunicó en el día de hoy la detención de al menos 348 personas de diferentes nacionalidades por pornografía infantil. Las informaciones captadas por las autoridades canadienses han permitido a otros efectivos policiales del mundo encontrar a los pederastas. La operación ha conseguido desmantelar una red internacional con epicentro en la compañía canadiense, Azovfilms.com, que utilizaba a niños para grabar vídeos sexuales. Cerca de 400 menores han sido rescatados en un operativo extendido a los cinco continentes. Las cintas fueron distribuidas en 94 países, según fuentes policiales.

La investigación, iniciada en 2010, permitió conocer los empleos de algunos de los criminales. Entre las ocupaciones destacables figuran médicos, trabajadores sociales y sacerdotes, profesiones con arraigo social y posibilidad de cercanía a los menores. Desde 2010 las autoridades han incautado 45 terabites que almacenaban miles de fotografías y vídeos que mostraban a pequeños, de entre 5 y 12 años, en posturas sexuales. Las sospechas en torno a Azovfilms y su propietario, Brian Way, de 52 años, llevaron a una inspección en 2011 de la sede empresarial en Toronto.


Azovfilms se dedicaba a distribuir DVD´s y películas en streaming de carácter naturista, legales en EE.UU. y Canadá. Con esta tapadera Way enviaba vídeos con imágenes de menores desnudos a 94 países, obteniendo unos ingresos anuales de 1.600 millones de dólares. La policía de Toronto dio los pertinentes avisos a los agentes de cada país en los que se tenía constancia de la presencia de pederastas partícipes en esta red. Después de una serie de pesquisas, una vez empezaron las sospechas, la policía de Toronto compró material de manera encubierta para certificar sus presagios. Way fue detenido en 2011, gracias a unas órdenes de envío de material a EE.UU. que fueron inspeccionadas por la agencia federal encargada del correo postal.


La inspección de las bases de datos de Azov Films permitieron seguir el rastro del resto de los miembros de la red criminal. El grueso de las detenciones se han producido en Canadá (más de 100 personas), en EE.UU. (76) y en España (28).